* A partir de ahora, tenemos en clase una nueva herramienta que nos ayuda a gestionar esos momentos de nerviosismo, estrés o enfado que todos tenemos.
Se trata del FRASCO de la CALMA, genial idea de MARÍA MONTESSORI que consiste en un sencillo bote lleno de agua y copos de purpurina que, cuando se agita, se asemeja a nuestra mente en esas situaciones de descontrol. Podemos mirar cómo van cayendo los copos y cómo, poco a poco, el agua se va serenando, al igual que nuestra mente.
* Es importante tomar conciencia de nuestra emoción y poner la intención de tranquilizarnos mientras miramos con atención plena la caída de los copos.
* En la clase de 5º de Moraleja del Vino, cada niñ@ ha preparado su bote particular para usarlo en casa. En clase, tenemos otro que l@s niñ@s utilizan con frecuencia, cada vez que necesitan volver a la calma.
* En el aula de Infantil de El Perdigón, ésta ha sido la reacción de l@s niñ@s: