Hola a todo el mundo, me llamo Perfecta Nueno. Ese es el nombre que me pusieron mamá y papá. Dicen que cuando yo era niña, tanto de cara como de espalda, despierta o dormida, riendo o llorando, les parecía perfecta.Pero a medida que fui creciendo, la cosa cambió...Las exigencias de mis padres y de mi escuela fueron en aumen
Por eso, le he echado valor y he saltado a escena para expresar mi opinión al respecto. A todos los niños y mayores que hayáis abandonado la búsqueda de la perfección, os invito a escucharme.